El miedo te paraliza, no te deja hacer lo que verdaderamente deseas hacer.
Detrás de cada miedo está la persona que deseas ser.
El miedo nos lo ponemos nosotros mismos, significa que no existe.
Tú lo creas, tú lo puedes destruir.
Enfrenta tus miedos y te convertirás en la persona que quieres ser.
Si corres de tus miedos, no estás viviendo. Estás vivo pero no quieres libertad.
No tienes el control de tu día, el día te está controlando a ti.
Mucha gente no trabaja en sus sueños, sabes ¿Por qué?
Una razón es por miedo, miedo al fracaso. «¿Y qué pasará si las cosas no funcionan?»
Y el miedo al éxito. «¿Qué tal si todo resulta, pero no puedo manejarlo?»
Esa gente no toman ningún riesgo.
Camina hacia tu miedo, abraza tu miedo, no intentes esquivarlo.
Parte de vivir como ser humano como ser espiritual es abrazarlo, incluyendo:
Tu miedo, tu amor y no huir de nada porque esa es la experiencia de vivir.
Y es en esa riqueza donde encontramos el más bello arte, la más bella música, encontramos la riqueza de lo que el alma humana puede ofrecer.
Para vencer a este miedo debes amarte a ti mismo y afrontarlo.
Hacer cualquier cosa que creas que es correcto, enfrenta ese miedo y hazlo.
Verás que cuando más rápido lo enfrentes más rápido te sentirás aliviado.
¿A qué le tienes miedo?